16 de enero de 2009

Ciencias

La paciencia no es una ciencia, pero debería serlo para sobrellevar la inconsciencia de algunos, que la ponen a prueba más de lo debido.

Las maneras diferentes de ver el mundo, pensar y actuar la van colmando lentamente. Pido clemencia.

Hay gente que va por la vida como si tuviera licencia para molestar. Se la deberían cancelar, por decencia.

Una irreverencia, una insolencia, a veces la complacencia o simplemente la displicencia nos obligan a jugar al tibetano para no reaccionar con demencia.

No alcanza con tener mucha sapiencia para vivir más tranquilo y feliz. Hay que tener paciencia, con frecuencia.

Agradezco si a alguien le sobra un poco y la quiere compartir. Sería una buena coincidencia.

También apreciaré al que quiera hacer un poco de docencia y explicarme cómo se consigue.

Se los pido por favor. Y con insistencia.